La practica mas importante, es introducir requisitos que sólo cumplen algunos.Una compleja red de intermediarios, funcionarios y hasta políticos llegan a definir quién y cómo se adjudican las millonarias licitaciones de la ciudad.
Cuando la Administración planea la construcción de una vía, la primera misión de este 'lobbysta' es conseguir los borradores de los prepliegos. "Esto tiene un fin: llevarlos a la empresa interesada en el proceso para que vaya conociendo las condiciones de antemano y empiece a tomar ventaja sobre sus eventuales competidores".Luego, 'mandos medios' de las entidades -algunos de ellos cuotas burocráticas de ciertos concejales- son los encargados de filtrar tales documentos, según revelan las mismas fuentes consultadas.
Ya con los borradores de los prepliegos en la mano, entidades y contratistas se ponen de acuerdo en las condiciones especiales que les van a introducir a los pliegos definitivos de la licitación.
Por lo general las condiciones especiales son, el número de contratos realizados o los años de trabajo acumulados que deberá certificar la firma interesada para poder pujar y segundo un indicador de liquidez para la cual la empresa se prepara con suficiente anticipación.
Otro filtro común son las visitas obligatorias a los sitios donde se van a hacer las obras y que las convocan de manera súbita. Al interesado le exigen que ese día lleve la unión temporal que va a conformar para hacer la obra. Son condiciones excluyentes, absurdas", sostiene Ortiz. Y lo que suele suceder es que la firma que ha hecho el 'lobby' conoce todo previamente.
Según la oficina Anticorrupción, en la cadena no faltan manipulación a la hora de calificar las propuestas; maniobras ilícitas para que los interesados puedan cambiar sus documentos cuando el tiempo ha vencido y hasta negocios con las firmas de interventoría con el fin de asegurar su "silencio" cuando se inicien los trabajos.
El funcionamiento de esta cadena demanda gruesas sumas de dinero para subsistir y el pago de comisiones entre las partes involucradas, algunas de las cuales -para evadir sospechas de incrementos injustificados en sus patrimonios- optan por cuentas bancarias cifradas y con reserva en el extranjero. La cuenta se puede poner a nombre de un número y queda protegida", dice otro ex funcionario.
Para esta cadena, no menos importante es el acceso a los órganos de control, pues en ocasiones un simple concepto de una Contraloría o una Personería pueden terminar afectando favorablemente cualquier licitación.
Una persona que trabajó para el Distrito en los últimos años también menciona pagos en bienes raíces y hasta en ganado. "En esto hay una 'cabezas', pero no necesariamente es el Alcalde", afirma.
El contralor distrital, Miguel Ángel Morales Russi, fue salpicado en una grabación en la que el representante Germán Olano habla con Miguel Nule, cabeza de un grupo constructor, donde le manifiesta supuestamente una molestia de Morales Russi por la demora en el pago de una comisión que asciende a 2.200 millones de pesos.
Todos los órganos de control a nivel nacional investigan a Morales Russi y a Olano, pero no emiten fallos o condenas solo se queda en investigaciones.
Por su parte, el personero distrital, Francisco Rojas Birry, está enredado por sus presuntos nexos con la captadora ilegal de dineros DMG y jamás volvió a salir a la luz pública. Su caso sigue sin ser resuelto por las autoridades.
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