martes, 3 de enero de 2012

Paises ricos compran tierras fertiles de los paises pobres

Hace un par de semanas, el Parlamento de Argentina, uno de los líderes mundiales en producción de alimentos, aprobó una ley para poner coto a la venta de su territorio a extranjeros, que ya alcanza el 10 por ciento, con objeto de que nunca supere el 15 por ciento, y poniendo límites a la extensión de propiedades foráneas en suelo argentino.

Según un reciente informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en el 2011 se dispararon los precios de los alimentos y la fiebre por la adquisición multinacional de tierras cultivables y de zonas ricas en agua.

Los países más pudientes estarían comprando inmensos territorios en toda el África subsahariana a fin de crear explotaciones agrícolas destinadas a la alimentación o a la producción de agrocombustibles. Su director saliente, Jacques Diouf, pone el dedo en la llaga: "Estados y empresas occidentales están interviniendo millones de hectáreas de tierras agrícolas de países en desarrollo para asegurar su aprovisionamiento alimentario a largo plazo".

La multiplicación de estas transacciones (que alcanzan un territorio equivalente al total de Europa Occidental) podría entrañar, según Diouf, "una forma de neocolonialismo: Estados pobres produciendo alimentos para los países ricos a expensas de su propia población hambrienta".

El Banco Mundial denuncio que en Mozambique, Sudán del Sur, Tanzania, Etiopía, Uganda, Zambia, Liberia, Madagascar, Uganda, Congo, es decir practicamente toda el Africa, se exportan miles de toneladas de alimentos básicos desde países que, paradójicamente, viven de la asistencia humanitaria internacional para combatir el hambre y la desnutrición.

Como formalmente las tierras son de propiedad estatal, son casi siempre los propios gobiernos, poco transparentes o directamente corruptos, quienes hacen las operaciones al margen de la población.

En Etiopía, el quinto país más hambriento del mundo, donde unos 13 millones de habitantes dependen de la ayuda humanitaria para comer, el Gobierno acaba de ceder más de 40.000 kilómetros de tierras.

La empresa surcoreana Daewoo Logistics obtuvo del Gobierno de Madagascar la concesión de un millón de hectáreas en ese país por una duración de 99 años para cultivar 5 millones de toneladas anuales de maíz y producir aceite de palma en otras 120.000 hectáreas, en total más de la mitad de las tierras cultivables de la isla, destinada a las reservas alimentarias de Corea del Sur. Sudán del Sur se dispone a ceder a los inversores extranjeros unas 900.000 hectáreas de tierra y otro tanto va a producirse en Tanzania. 
Congo tiene ya en manos de inversores extranjeros más de la mitad de sus tierras cultivables.

Según el documento que acaba de difundir la FAO sobre 'El estado de la inseguridad alimentaria en el mundo', el alza mundial de precios en los alimentos como el arroz, trigo, maíz y semillas oleaginosas seguirá aumentando hasta cerca de un 50 por ciento de aquí al 2020, debido a la especulación en los mercados.

La FAO también presentó en días pasados en Santiago de Chile un informe en el que señala "intensos procesos de concentración y extranjerización de tierras en América Latina y el Caribe". El funcionario de este organismo Fernando Soto Baquero advertía que "los gobiernos de la región deben hallar formas para asegurar que estos procesos no tengan efectos negativos sobre la seguridad alimentaria".

Las agencias internacionales dan cuenta de que compañías de India están recorriendo América Latina en busca de oportunidades para adquirir tierras que les aseguren el suministro de materias primas. Ya han adquirido 13.000 hectáreas en Brasil y 600.000 en Argentina. Por su parte, China, Corea del Sur, Arabia Saudí, Qatar y operadores al servicio de fondos especulativos realizan operaciones de compra de territorio latinoamericano con un alcance todavía no cuantificado por los organismos internacionales.
Hace dos semanas, diversas organizaciones ambientalistas denunciaron ante el Ministerio de Ambiente lo que consideran una "extranjerización" del territorio: grandes extensiones de tierra que forman parte de los ríos que nacen en el macizo colombiano han sido compradas apresuradamente por extranjeros en Putumayo, Huila, Cauca, Caquetá, Nariño y en el piedemonte de la cordillera Oriental. "Se estarían privatizando los nacimientos de los ríos más importantes de Colombia por parte de empresas extranjeras".


No hay comentarios:

Publicar un comentario